Fue un accidente aéreo ocurrido el domingo 15 de agosto de 1976, al estrellarse en el volcán Chimborazo un avión de la aerolínea Saeta en ruta de Quito a Cuenca. La ruta se considera un tramo peligroso debido al obstáculo natural del nevado Chimborazo.
El último contacto del piloto, reportó que estaba sobrevolando la ciudad de Ambato, pero luego se perdió toda comunicación. A bordo de la aeronave viajaban 4 tripulantes y 55 pasajeros, donde la nave quedó oculta entre el glaciar del nevado. Los restos estuvieron desaparecidos durante 26 años. Fue descubierto por Flavio Armas y Pablo Chíquiza en octubre del 2002.